El prototipo de aerogenerador urbano carece de palas convencionales y podrá adaptarse al tipo de viento predominante en cada ubicación.
¿Pueden los aerogeneradores convertirse en una solución de energía renovable urbana? Los paneles solares fotovoltaicos instalados en azoteas y tejados ya forman parte del paisaje urbano, pero hasta ahora existían algunos obstáculos, como su tamaño, para que la energía eólica se sumara a la tendencia. Sin embargo, una nueva generación de aerogeneradores urbanos está empezando a cambiar las cosas. Si hace poco hablamos de los aerogeneradores sin palas desarrollados por una empresa española, ahora le llega el turno a un nuevo modelo de turbina eólica urbana con una llamativa característica: está diseñada con IA. En este artículo te explicamos la tecnología que hay detrás de este avance con el que se reducirá la huella de carbono de los edificios.
Birmingham Blade, un aerogenerador urbano a medida
El desarrollo de este aerogenerador ha reunido a un fabricante de piezas de metal de precisión, una empresa de IA y la Universidad de Birmingham para afrontar varios retos. Normalmente, un aerogenerador necesita una velocidad mínima de diez metros por segundo, pero en la ciudad británica de Birmingham la media, de alrededor de 3,6 m/s, es mucho más reducida. A eso había que sumar las turbulencias que generan los diversos edificios de la ciudad. ¿Había alguna manera de diseñar un aerogenerador capaz de operar bajo esas condiciones?
La respuesta reside en el uso de inteligencia artificial, que ha permitido generar más de dos mil diseños en el plazo de unas pocas semanas en lo que se conoce como tecnología de diseño evolutivo. Este enfoque, parecido al de la selección natural, ha logrado refinar el prototipo de turbina eólica hasta llegar a la versión final, bautizada como Birmingham Blade.
El dispositivo utiliza un sistema de palas curvas que giran en torno a un eje vertical y, según los desarrolladores, es hasta siete veces más eficiente que los diseños utilizados hasta la fecha en la ciudad inglesa que le da nombre. El enfoque adoptado les ha permitido partir de cero sin el bagaje de diseños anteriores y reducir significativamente los recursos económicos necesarios.
Tras las pruebas realizadas con el prototipo, los responsables del proyecto tienen previsto fabricar una versión de aluminio que se instalará en una azotea de Birmingham donde se podrá comprobar su durabilidad y rendimiento a largo plazo. El objetivo es lanzar un modelo de aerogenerador compacto a finales de 2025 que lleve la generación eólica al centro de las ciudades. Además, el equipo ya está trabajando en otro diseño adaptado a las condiciones atmosféricas de Edimburgo.
Fuente: imnovation-hub.com
