CONSTITUCIÓN. En conjunto con la Policía de Investigaciones (PDI), el Ministerio Público llevará a cabo una serie de peritajes al buque Cobra, con el objetivo de examinar su funcionamiento y buscar posibles evidencias aún presentes a bordo. Estas diligencias son clave para avanzar en las conclusiones de la investigación en curso.
Esto ocurre tras la declaración del abogado de la empresa Blumar, Héctor Espinoza, quien reconoció que el buque Cobra podría haber colisionado con la lancha Bruma, accidente que provocó la desaparición de varios pescadores la madrugada del sábado 30 de marzo frente a las costas de Coronel. En este contexto, el fiscal nacional Ángel Valencia viajará a la Región del Biobío para reunirse con los familiares de los tripulantes desaparecidos.
La información fue confirmada ayer en Constitución por los propios familiares, quienes señalaron que el encuentro se realizará el lunes. Por esta razón, no se concretará la reunión que tenían programada para hoy con la fiscal regional del Biobío, Marcela Cartagena, dado que Valencia arribará a la zona el 28 de abril.
Durante dicha reunión, de carácter informativo, se explicará a las familias el procedimiento para trasladar el buque Cobra a dique seco, maniobra que se efectuará en Asmar, Talcahuano, con financiamiento del Ministerio Público. “La Fiscalía Nacional ha autorizado cubrir los costos del traslado y peritaje, lo que permitirá a la PDI y a sus peritos realizar estudios clave sobre el funcionamiento del barco y posibles evidencias a bordo”, indicó la fiscal Cartagena.
DECLARACIONES DEL ABOGADO
Alejandro Espinoza, abogado de la empresa Blumar, reconoció por primera vez la posibilidad de una colisión entre el barco industrial y la lancha Bruma. La defensa entregó un informe al Ministerio Público con antecedentes que respaldan esta hipótesis, la misma que han sostenido desde un comienzo las familias de los afectados.
Sin embargo, el abogado advirtió que, aun si se confirma el choque, esto no implica necesariamente responsabilidad por parte de la tripulación del Cobra. Insinuó, en cambio, una posible falla de los tripulantes de la Bruma, señalando que no habrían reportado su ubicación ni activado el posicionador automático para evitar colisiones.
CONTROVERSIA POR EL RADAR
Espinoza añadió que, pese a tener sus sistemas de prevención activos, el radar del Cobra no logró detectar la presencia de la lancha. Estas afirmaciones fueron duramente criticadas por Rafael Poblete, abogado de las familias, quien calificó la estrategia como “cuestionable” por intentar responsabilizar a quienes no pueden defenderse.
Más enfática fue Claudia Urrutia, vocera de las familias y dirigenta de los pescadores artesanales, quien expresó su indignación: “Echarle la culpa a personas fallecidas, trituradas o en condiciones aún peores… Vamos a demostrar, como siempre lo hemos hecho, que la empresa está mintiendo y distorsionando la verdad”, declaró a Radio Biobío la presidenta de los Bacaladeros del Maule.